El estancamiento es
una etapa normal y transitoria del proceso de adelgazamiento, vamos a ver por
qué.
Sumar el adelgazamiento de las 4 últimas semanas y dividirlo entre 4. Si el
promedio es menor de 225 g, es
probable que se trate de una fase de estancamiento. Por ejemplo:
Si una persona en 1 mes ha adelgazado 600
gramos y esto lo dividimos en 4 semanas, el resultado 150 gramos por lo
que sí podríamos pensar que hay un estancamiento.De todas formas, el peso no es el mejor indicador porque puedes estar perdiendo
músculo y quedándote con la grasa e igualmente te verás flácida.
Por muy ilógico que
suene, estancarse a veces forma parte de adelgazar. La buena noticia es que hay
muchas cosas que se pueden hacer para corregir posibles errores y darle un
impulso renovado a su adelgazamiento.
1.¿Respetas el tamaño de las porciones? Con el tiempo y la confianza, puedes relajarte y las porciones pueden ir
aumentando sin que te des cuenta, y te “acostumbras” a nuevas cantidades
calculadas totalmente a ojo.
Presta atención y vuelve a calcular
el tamaño de las porciones como si fuera la primera vez, asegúrate de
que su medida y peso equivalen a tus requerimientos. Una opción es pesar los alimentos durante varios días de
modo que te familiarices de nuevo con las cantidades correctas. Y aún mejor es
recurrir a un profesional que pueda elaborarte un plan de alimentación.
2. ¿Ingieres alimentos con saciantes? Las
proteínas, las grasas saludables, verduras son una excelente
opción para conseguir una sensación de saciedad durante más tiempo. Recuerda
que saciedad no es comer hasta hartarse, porque esos alimentos tienen calorías.
Puedes aplicar esta regla de “comería un poco más peeero ya no me sentaría
bien” es una manera de ir escuchando a tu cuerpo.
También presta atención sobre todo a las cantidades de fruta. Si estás
adelgazando más lentamente o tu adelgazamiento se ha detenido, comprueba si has comido mucha fruta y
reduce las cantidades.
3. ¿Comes todos los días lo mismo? Una plan de
alimentación saludable no implica comer aburrido. Cierto que todos tenemos alimentos y bebidas favoritos, pero no debemos limitar la selección de alimentos en función de
nuestras preferencias. Nuestro organismo necesita todos los nutrientes, y comiendo siempre lo mismo nos arriesgamos a aburrirnos
y abandonar el plan.
4.¿Registras todo en la Lista de control? Esto te ayuda a ser consciente de lo que comes y bebes en un día. A veces se
tiende a olvidar pequeñas cantidades de alimentos o tentempiés. Además es una
manera de tener menús planificados, piensa en este registro como tu diario del éxito
porque si hay algún cambio puedes remitirte a él y evaluar qué has hecho
diferente, es imposible acordarse con detalle de lo que uno come en una semana.
5. ¿Practicas suficiente actividad física?
Si practicas con regularidad
ejercicio disminuirás la grasa corporal, desarrollarás tus músculos,
liberarás estrés, mejorará tu estado de ánimo y la elasticidad de los tejidos.
Recuerda que el cuerpo también se adapta al ejercicio, y lo que hoy te parece
duro, mañana ya no lo será tanto por lo
que debes exigirte, dar un poco más
6 ¿Tienes
algún problema médico?
Si después de examinar las causas más habituales del estancamiento no
detectas a qué se debe, puedes consultar
con tu médico. Él podrá determinar si existe algún factor que
obstaculice tu pérdida de peso.
Si estás tomando alguna medicación,
lee en el prospecto cómo repercute sobre el peso o el adelgazamiento, y
consulta también con tu médico.
Recuerda sin pausas, pero sin prisas porque tu cuerpo no entiende de
plazos, no funciona como un reloj ni
respeta los días de la semana. El sobrepeso no apareció en unos días, sino
que se desarrolló de forma lenta y continua. Por ello debes darle tiempo a tu cuerpo para adaptarse a la nueva situación, al
adelgazamiento. Sólo un adelgazamiento lento y sensato puede conducir a
un mantenimiento del peso a largo plazo.
Y sobretodo no pierdas la motivación. Cuenta los éxitos conseguidos y alégrate por Cada paso
hacia adelante. ¿Realmente vale la pena abandonar, por una o dos semanas en la
que no ve slos resultados esperados? Claro que no! Hay que continuar al pie del
cañón.
Además, nuestros
éxitos de adelgazamiento no se ven sólo a través del cristal de la báscula. Se ven en otros aspectos.¿Cómo se sienten por
dentro a nivel de energía o cansancio, estado de ánimo?